Fondos de cobertura o hedge funds

Definición y principales características

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Los fondos de cobertura, popularmente también conocidos como hedge funds, son una clase de fondo de inversión que actúa con mucha mayor libertad y flexibilidad que los fondos convencionales. Este tipo de vehículo de inversión ofrece una rentabilidad potencial muy alta, pero entraña a su vez un considerable riesgo para el inversor.

En pocas palabras
  • Un fondo de cobertura  es un vehículo de inversión que compra toda clase de activos con el dinero de los contribuyentes de ese mismo fondo de inversión. Los partícipes suelen ser instituciones financieras (bancos, aseguradoras, fondos de pensiones o inversión) o personas con alto poder adquisitivo.
  • Los fondos de cobertura tienen mucha más libertad para operar que otros fondos de inversión y su regulación es mucho más laxa. En este sentido, pueden endeudarse en varias veces el valor de su patrimonio y comprar cualquier tipo de activo.
  • A pesar de que ofrece grandes rentabilidades, también tiene algunos inconvenientes como la baja liquidez, el alto riesgo y la poca transparencia de sus operaciones. Asimismo, se exigen grandes desembolsos para formar parte de un hedge fund.
  • Los fondos de cobertura tienen una gestión muy activa por parte de sus gestores, que a cambio, reclaman grandes comisiones, especialmente por rendimiento. Los gestores llevarán a cabo diversas estrategias de naturaleza compleja para tratar de conseguir rentabilidad para sus inversores.

¿Qué es un hedge fund o fondo de cobertura?

Un fondo de cobertura, o hedge fund en su versión en inglés y más utilizada en el ámbito internacional, es una Institución de Inversión Colectiva (IIC) que tiene una serie de características que los hace especialmente flexibles y diferentes a otros tipos de fondo de inversión. 

En España los fondos de cobertura son oficialmente conocidos como fondos de inversión libre y entre sus principales particularidades encontramos que sus gestores pueden delimitar estrategias con mucha más libertad que otros fondos. Tal es el caso de su capacidad para comprar cualquier clase de activo por volátil o arriesgado que sea o de endeudarse sin tener tantos límites como el resto de fondos convencionales.

Esta mayor libertad para delimitar y ejecutar las políticas de inversión de los fondos de gestión libre, como también se les llama a los hedge fund, hace que muchos de ellos tomen decisiones muy arriesgadas, incluso a contracorriente de los mercados financieros. En contrapartida, estos fondos de cobertura pueden ofrecer rentabilidades muy sustanciosas a sus partícipes.

¿Cómo funciona un hedge fund?

El origen de los hedge funds se remonta a 1949, cuando el australiano Albert Winslow Jones creó una sociedad de inversión con una particular política de compra de activos. Por una parte, se posicionaba en largo en activos financieros que pensaba que iban a revalorizarse, es decir, comprar dichos activos para venderlos más tarde cuando aumentarán su valor. 

Por otra parte, de manera simultánea se posicionaba en corto para otros activos sobrevalorados, en otras palabras, apostaba a bajadas de valor de dichos activos. En este sentido, lo que se pretende con un fondo de cobertura es “tener cobertura” ante cualquier eventualidad del mercado, suba o baje y ganar dinero, independientemente de la tendencia alcista o bajista del mismo.

Hoy en día, los hedge funds recurren a multitud de enrevesadas estrategias para garantizar la rentabilidad a sus accionistas al margen de la marcha de los mercados financieros y globales.  Para ello, sus decisiones de inversión son altamente complejas y difíciles de entender para los legos en la materia. Y es que, en pos de lograr las altas rentabilidades que prometen a sus socios, utilizan instrumentos financieros bastante opacos e intrincados como son los derivados.

De hecho, los gestores de estos fondos de cobertura son expertos en inversión y en muchas ocasiones se adelantan a las tendencias en los mercados y en la economía. A cambio, los partícipes de estos fondos pagan comisiones bastante cuantiosas, especialmente cuando las estrategias de los gestores resultan ser exitosas.

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Características de los fondos de cobertura

La regulación y las características de los hedge fund varían en algunos puntos con los fondos de inversión corriente, especialmente en los siguientes aspectos:

Número de partícipes

Se exige un mínimo de 25 partícipes en un fondo de cobertura, frente a los 100 partícipes que se demandan en otros tipos de Instituciones de Inversión Colectiva.

Activos

Los hedge fund pueden tener en cartera cualquier clase de activo, desde acciones, derivados, materias primas o incluso bienes inmobiliarios, pudiendo así tener un conjunto de activos altamente diversificado.

Comisiones

Al tratarse de un vehículo de inversión con una gestión muy activa, en la que los gestores están realmente implicados en la toma de decisiones y entregan mucho valor al cliente, las comisiones serán notablemente más altas. 

Normalmente, existen dos comisiones que cobran fondos de cobertura en España:

  • Comisión de gestión: generalmente suele oscilar entre el 1% y 2% del patrimonio del fondo y se le carga al partícipe independientemente del resultado obtenido por el hedge fund.
  • Comisión de éxito: varía entre un 15% y un 25% del beneficio obtenido por el fondo en cierto periodo de tiempo. Por lo tanto, si la rentabilidad del fondo es 0, esta comisión será del 0% también.

No obstante, tal como apunta la CNMV, en España no existe un límite máximo legal para estas comisiones en línea con la libertad que gozan los fondos de inversión libre.

Riesgo y transparencia

Los fondos de cobertura representan un riesgo alto para el inversor, ya que las políticas de inversión de este tipo de fondos no son del todo seguras y además utilizan el apalancamiento, es decir, se endeudan para comprar activos. De hecho, estos fondos, a diferencia de otros, se pueden endeudar hasta 5 veces el valor de su propio patrimonio, lo que aumenta más el riesgo de cualquier operación. 

Por otro lado, son menos transparentes que un fondo tradicional, ya que, por ejemplo, solamente están obligados a declarar su valor liquidativo cada 3 meses, aunque muchos lo realizan de manera mensual.

Requisitos de entrada

Los hedge fund no son aptos para todos los inversores. De hecho, los principales partícipes de este tipo de fondos no son particulares, sino instituciones profesionales como bancos, aseguradoras, fondos de pensiones o incluso fondos de inversión.

Tanto es así, que uno de los requisitos para invertir en un fondo de cobertura en España, no siendo profesional, es aportar como mínimo 100.000 euros. Por lo tanto, dado la cantidad de dinero necesaria y la complejidad de su funcionamiento, hace que este tipo de inversión esté al alcance de muy pocos.

Liquidez

Se considera que un hedge fund es un activo poco líquido debido a que pueden exigir un período mínimo de inversión y solo se les exige efectuar reembolsos cada tres o seis meses.

Ventajas y desventajas de los fondos de cobertura

Entre las ventajas de los fondos de cobertura frente a los fondos corrientes encontramos las siguientes:

  • Rentabilidad potencial mucho más elevada a la de otros productos de inversión, a cambio, eso sí, de exponerse a mayor riesgo.
  • Rentabilidad incluso en tiempos donde la tendencia del mercado sea bajista.
  • Mayor diversificación al tener a su disposición un mayor abanico de activos que un fondo tradicional.

Por otro lado, algunas de las desventajas de invertir en un hedge fund serían:

  • El riesgo es muy elevado dadas las estrategias llevadas a cabo y al apalancamiento
  • La liquidez es menor que en la de otros fondos de inversión
  • Menor supervisión y control por parte de las autoridades competentes, especialmente en aquellos fondos de cobertura localizados en países extracomunitarios y especialmente en paraísos fiscales.
  • Menor transparencia al solo saber el valor real de las participaciones mensualmente o incluso trimestralmente. Además, en muchos casos este valor no está verificado por auditores externos.
  • Mayores comisiones al no existir un límite máximo legal.
  • Mayor complejidad.
  • Barreras de entrada muy altas: solo apto para profesionales o gente con alto poder adquisitivo.

En conclusión, los fondos de cobertura son vehículos de inversión adecuados para muy pocos que reúnan los conocimientos suficientes, así como el capital necesario. Por otra parte, la complejidad y el riesgo hace que debamos extremar la cautela en caso de que queramos invertir en este tipo de fondos.

Para ello, tal como recomienda la CNVM, deberemos leer el DFI (Documento con información fundamental para el inversor) y deliberar detenidamente si esa es la inversión idónea para nosotros.

Por otra parte, vale la pena recordar que para tener éxito en el mundo de las inversiones es necesario diversificar nuestra cartera con activos de diferentes rentabilidades y riesgos. Por este motivo, si llegamos a invertir en un hedge fund, la suma que depositemos debería ser solamente una parte de nuestro patrimonio inversor, tratando de elegir otros activos con otras características.

Tipos de fondos de cobertura

Podemos clasificar los diferentes tipos de hedge fund en función de la estrategia que adoptan, aunque normalmente usarán una combinación de varias de ellas:

Estrategias direccionales

Se basa simplemente en observar y predecir las principales tendencias en los mercados mundiales y en consecuencia tomar posiciones bajistas o alcistas según el caso.

Posiciones largas y cortas

Esta estrategia, también llamada long-short, tal y como hemos explicado antes, consiste en comprar activos infravalorados y al mismo tiempo operar en corto con activos altamente relacionados que se consideren sobrevalorados.

Esta operación en corto consiste en pedir prestado un activo a un tercero (actualmente se realiza mediante un bróker) y vender ese mismo activo en el futuro para luego devolverlo al bróker. Si el activo sube de valor, perderemos dinero, pero en caso de que su precio disminuya, obtendremos una ganancia, ya que el precio de venta será el que tenía cuando lo pedimos prestado en primera instancia.

Apostar sobre empresas en actual mal estado 

Se trata de predecir el comportamiento futuro de una empresa que no tiene buen rendimiento en la actualidad. Por lo tanto, los fondos de cobertura pueden posicionarse en largo sobre aquellas que vaticinen que se recuperarán y posicionarse en corto en aquellas que, por el contrario, continuarán su tendencia bajista. 

Estrategia de arbitraje

Los hedge fund buscan desajustes de precios en los mercados financieros antes de que estos se equilibren de manera natural. Estos desequilibrios no suelen durar mucho y normalmente el margen de desajuste es bastante pequeño. Por lo tanto, para sacar suficiente rentabilidad de estas operaciones se tiene que invertir una gran cantidad de dinero.