05.02.2020 | 9 minutos de lectura | Imprimir artículo

Cómo organizar las finanzas familiares

Si vas a ser padre o madre primerizo o acaba de llegar un bebé a la familia, estás empezando un nuevo capítulo que suele venir con un montón de gastos adicionales. Por lo tanto, es el momento perfecto para que adaptes tus finanzas a la nueva situación. Para ayudaros a tu pareja y a ti a tenerlo todo controlado cuando decidáis ampliar la familia, hemos preparado una serie de consejos sobre cómo organizar las finanzas familiares.

La llegada de un niño cambia drásticamente la vida cotidiana de sus padres y cubrir todas sus necesidades requiere de un desembolso importante. Eso no quiere decir que tener un hijo te vaya a acabar costando millones de euros —como afirman algunos titulares alarmistas— ni que la economía de tu hogar esté en serio peligro, pero, aunque nunca te hayas parado a pensar en ello, sí sale a cuenta (literalmente) dedicar algo de tiempo a analizar los posibles aprietos financieros en los que te podrías encontrar. Todo lo que hagas hoy para mejorar las circunstancias de tu familia, lo agradecerás en el futuro. Al principio, hay que dedicar bastante tiempo a cambiar de modus operandi, sí, pero no dejes que eso te desanime; el paso más importante es ponerse manos a la obra y empezar a elaborar un plan adecuado para tu familia.

Consejo 1: Crea un presupuesto

Contar con un presupuesto escrito te ayudará a tener siempre una panorámica de tu situación y evitar sorpresas desagradables. Como primer paso, los asesores financieros recomiendan observar de cerca los movimientos de la cuenta bancaria y clasificar los gastos por categorías; así, sabrás exactamente adónde va tu dinero. A continuación, crea un presupuesto semanal, mensual o anual… o mejor aún, los tres. También es fundamental que te asegures de no estar pagando de más por los servicios que tienes contratados. Por ejemplo, consulta las tarifas de otras comercializadoras eléctricas para averiguar si puedes ahorrar en la factura de la luz y cancela todas las suscripciones y membresías innecesarias que tengas contratadas. Un presupuesto bien elaborado permite establecer objetivos concretos, identificar debilidades y oportunidades, y estar preparado para los imprevistos que, tarde o temprano, siempre llegan, sobre todo cuando se tienen hijos.

Consejo 2: Compra con sensatez

Pañales, pijamas, biberones… la lista de artículos supuestamente imprescindibles para bebés es interminable. Normalmente, los padres primerizos no saben qué comprar ni dónde hacerlo…. ¡y hacerse con el lote básico de artículos para recién nacidos puede acabar saliendo bastante caro! Mantén la cordura y no pierdas el control comprando y comprando sin mesura. Sí, vas a necesitar un biberón y un carrito de bebé, pero asegúrate de comprar cosas nuevas solo cuando hagan falta de verdad.

Consejo 3: Ahorra dinero

Cuando tengas claro que quieres tener un hijo o haya un bebé en camino, es aconsejable añadir fondos al colchón financiero para poder hacer frente a los numerosos gastos y compras. Es decir, ¡ahorra mientras puedas! Los asesores financieros también suelen decir que, cuanto antes se empiece, mejor; esta regla de oro es válida siempre, independientemente de si estás pensando en tener hijos o no. Hay muchas maneras de incrementar el ahorro: reduce tu presupuesto para el supermercado, consigue una segunda fuente de ingresos o haz alguna inversión. Si te decantas por este último método, Raisin ofrece alternativas de inversión inteligentes y rentables. Además, Raisin permite a sus clientes acceder de manera rápida y fácil a las cuentas de ahorro y a los depósitos a plazo fijo y flexibles más atractivos de toda Europa.

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Consejo 4: Aprovecha las ventajas fiscales para familias

¿Has consultado si tu familia tiene derecho a alguna ventaja fiscal? Si todavía no tienes hijos, es el momento de averiguar de qué ayudas e incentivos podéis disfrutar los tuyos y tú.

Si vas a tener tu tercer hijo, disfrutarás de las ventajas fiscales para familias numerosas, que incluyen la deducción de 1200 euros (2400 euros si se tienen más de 5 hijos) en la declaración de la Renta. A esta desgravación hay que sumar las deducciones autonómicas, que varían según la comunidad. Las ventajas de las familias numerosas también se aplican a las familias monoparentales con dos hijos y las personas con un descendiente o ascendiente con discapacidad a cargo; estos últimos podrán, además, desgravar 1200 euros por cada descendiente o ascendiente con discapacidad a cargo.

Los padres jóvenes con bajos ingresos deben comprobar si pueden deducir un porcentaje de los gastos de alquiler en su declaración de la Renta. Esta deducción es autonómica, por lo que la cantidad a desgravar y las condiciones para hacerlo variarán de una comunidad autónoma a otra.

Si puedes, una opción interesante es apartar el dinero ahorrado a través de estas desgravaciones en una cuenta de ahorros para tu hijo o invertirlo en depósitos a plazo fijo y depósitos flexibles. Los clientes de Raisin pueden abrir un depósito o cuenta en cualquier momento, para que les resulte todavía más fácil ahorrar para el futuro de sus hijos.

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Consejo 5: Utiliza los permisos y prestaciones por maternidad y paternidad

Cuando los niños todavía son pequeños, muchos padres quieren acortar su jornada laboral para pasar más tiempo con sus hijos. ¿Cómo decidir qué miembro de la pareja deja de trabajar y por cuánto tiempo deja de hacerlo? En el caso de adopción, guarda o acogimiento familiar de un menor de 6 años o con alguna discapacidad, la nueva normativa (Real Decreto-Ley 6/2019) da a ambos progenitores, el derecho a disfrutar de 16 semanas de baja. En el caso del nacimiento de un nuevo miembro de la familia, la duración de la baja de la madre será de hasta 16 semanas ininterrumpidas, de las cuales 6 tienen que ser inmediatamente posteriores al parto. En cuanto a la baja por paternidad, la nueva normativa la ha ampliado, pero su aplicación es progresiva: desde el 1 de enero de 2020, el permiso es de hasta 12 semanas (las 4 primeras se disfrutan inmediatamente después del parto); a partir del 1 de enero de 2021, el permiso será de 16 semanas para ambos progenitores y los dos tendrán la obligación de tomarse 6 semanas justo después del nacimiento.

En principio, debes informar a tu empleador de que vas a cogerte la baja por maternidad o paternidad con, al menos, 15 días de antelación. Sin embargo, tu empresa dejará de pagarte durante dicha baja. En su lugar, el Estado asumirá ese gasto y te pagará el 100 % de la base reguladora por contingencias comunes. Además de la baja por maternidad o paternidad, si trabajas por cuenta ajena puedes coger una excedencia hasta que tu hijo cumpla los 3 años de edad. Recomendamos que te informes y hables con tu empleador con tanta antelación como sea posible.

En España, existen tres prestaciones económicas adicionales para las familias a las que llega un nuevo miembro: la prestación económica por hijo o por menor a cargo en régimen de acogimiento familiar permanente o guarda con fines de adopción, la prestación económica por nacimiento o adopción de hijo (familias numerosas, monoparentales y madres con discapacidad) y la prestación económica por parto o adopción múltiples. Eso sí, para recibir las ayudas, las familias deben percibir ingresos por debajo de los límites establecidos. Para información más detallada, visita la página de la Seguridad Social.

Consejo 6: Cúbrete ante los posibles imprevistos

Los imprevistos o accidentes pueden hacer a las familias sin seguros o con seguros insuficientes caer en un abismo financiero. Un seguro de responsabilidad civil familiar, por ejemplo, cubre a todos los miembros de la familia ante posibles demandas o reclamaciones que pueden llegar a ser de millones de euros. Otros riesgos reales para las familias, además de las demandas por responsabilidad civil, son la muerte de la persona que obtiene la mayor parte de los ingresos de la familia, la pérdida de ingresos como consecuencia de una incapacidad laboral, los daños al domicilio familiar y los accidentes graves con consecuencias a largo plazo. Por lo tanto, los asesores financieros recomiendan encarecidamente a los padres que estudien los diferentes seguros de vida disponibles, como los seguros de vida temporales, los seguros por discapacidad o los seguros de incapacidad laboral, así como los seguros para propietarios de viviendas y los seguros de accidentes personales. La combinación adecuada de estos productos puede ayudar a garantizar que, si sucede una tragedia, no dejes a tu familia con deudas.

Consejo 7: Sigue aprendiendo (y no te estreses)

A medida que vaya creciendo tu familia, también lo hará tu sabiduría paternal o maternal. Y es que, aunque del amor no se vive, no todo gira en torno al dinero; por muy bien que elabores tu presupuesto, es imposible que salga a la perfección a la primera… pero seguro que a la segunda o a la tercera va la vencida y aprendes a organizar las finanzas familiares. El saldo de tus cuentas tampoco garantiza que vayas a ofrecer la mejor educación a tus hijos. Sí, el dinero facilita mucho las cosas, pero no lo es todo. Lo más importante a la hora de educar a los tuyos es hacerlo siempre con mucho afecto y cariño… y eso tiene poco o nada que ver con el capital acumulado.